domingo, 28 de agosto de 2016

NAVAJA INGLESA - JOSEPH RODGERS'S KNIVES 1

NAVAJA INGLESA

No empezó esto cuando dejamos, andando, de lado la estación de Queensway hacia Portobello. No.. Ni siquiera cuando me presentaron al señor Setián. Impecable, atildado casi como petimetre pero con el subyugante acento de los del Plata. Recordaba a José Luis Villalonga en su película más famosa, cuando pasaba por brasileño broncíneo y adinerado. Insistió en que compráramos el otro libro, el de los punzones de la navajería clásica inglesa, pues ya había adquirido el otro: Cuchillos de exhibición Joseph Rodgers & sons-Colección de Samuel Setian (1999).

Así presenta el autor, ABel Domenech, el libro:

HISTORIA
La redacción de este libro me fue encomendada por mi amigo Samuel Setian, conocido coleccionista internacional de cuchillería fina y de alta calidad, quien proyecto una Muestra Itinerante de su fabulosa colección de cuchillos de la afamada marca británica Joseph Rodgers. El libro propuesto por Setian, debería ser un testimonio para futuras generaciones, no solo de su colección privada, sino también de toda la información obtenida y acumulada sobre Rodgers hasta la fecha. El libro ha sido lujosamente impreso en Chile, con fotografías de altísima calidad y a todo color, en un esfuerzo sin precedentes en el campo del colecionismo internacional.
Este libro se comercializa exclusivamente a través del Sr. Samuel Setian: teléfono 54-11-4-361-899

Sus características técnicas son: 

Año de publicación: 1999
Formato: 27 x 23 cm
Encuadernación: Tapa dura, tela, sobrecubierta plastificada
Cantidad de páginas: 304 páginas
Tirada: 6.000 ejemplares
Idiomas: 2.200 ej. en Castellano - 800 ej. en Portugués - 3.000 ej. en Inglés



Esta navajuela no es de la marca que nos ocupa, no; ya me gustaría. Como quiera que las imágenes y las palabras aunque se avengan de continuo discurren en diferente compás, aquí las coloco. 
Aún no se ha llegado a Portobello, antiguo lugar de cambalacheo de gitanos que ahora es un concurridísimo mercadillo de antigüedades; pero como está cerca ya se adelantan algunas de las comprillas. Esta, como chorizo, trae compaña colgandera; no me fijé en las leyendas, así que tuvo que avisarme el buen vendedor:"Girl Guides". Se trata de una navaja para la sección femenina de la organización "Scout". Tiene punzón desatanudos y hoja de punta caída de acero al carbono que pistonea bien. En el recazo está gravada la marca "Venture H M SLATER, -SHEFFIELD.









Allí se quedó una hermana en concha de tortuga, con una incrustación en la cacha que ponía "Rdo. de Toledo", pero que estaba compuesta en Francia. No he visto un abrecartas más delicado jamás. Allí quedó triste, y yo volvime igual.

martes, 23 de agosto de 2016

LA COUTELLERIE DU ROI-BRUXELLES 2: COUTEAU REMAUD, COUTEAU LE CAMENBERT DE VIALIS, COUTEAU DE ROBERT KLAAS


En la siguiente ocasión, ahora durante el estío, se volvió al Passage du Nord. Ya el alboroto fue el esperado y se contuvo no sin gran contención. El escaparate era el mismo pero la magia también lo fue. Aquí quede  muestra de ello.





En la primera visita durante ese verano flamenco estuvo allí la dueña pues era ella la que heredó el negocio, y su marido, al que habíamos conocido el anterior viaje, atendía el negocio solo porque el resto de la familia estaba de vacaciones. Era huraña y mal encarada; se malhumoró cuando le iba realizando peticiones que no se podían satisfacer porque  o bien no estaba disponible el modelo o si lo tenía no era satisfactorio. Recuerdo que me recomendó uno de la Boker plus que al abrirse perdió una arandela (acto seguido, sin conciencia de contradicción, subrayó que esa línea de productos, por china, era de dudosa calidad...). Al fin vínose conmigo una de particular composición:

Couteau Esprit tonneau, de Jean Michel Remaud; cachas de ébano de Macasar; hoja de acero inoxidable; Mango de 11,2 cms, hoja de 7cms, falso resorte y lomo de la hoja con limazos.

De alguna manera este imita otro modelo antiguo llamado Tonneau o mourutier, de procedencia sueca. Eran navajas de hoja escamoteable en el mango. Este que aquí se muestra sería la versión liner lock.









El de bajo ya le fue comprado al marido de la dueña; se acordaba de nuestra anterior visita y estuvo igual de obsequioso. Recuerdo su atildamiento y el grueso reloj acuático de Tag Heuer en su muñeca. Me costó mucho elegir uno y cayó este. 

Le camembert la dernière création de nos ateliers. Ce modèle existe exclusivement en buis. L'emblème du village de camembert est apposé sur la lame. Vous pouvez mettre le camembert dans votre poche. Il existe aussi la version en lame fixe pour table ou plateau à fromage.

Es pues, otro neorregional, de Vialis. Esta empresa es garantía de cuchillos bien hechos. Lleva el nombre del queso (no olvidemos que los franceses son los quidam que más valoran su ruralía, sus tradiciones, sus alimentos, sus oficios). La navaja más parece un cuchillito de caza por la hoja, que sirviera para desollar. Hoy ya también se ofrece en otras maderas, y no solo boj como se dice en su página oficial.









Aquí  una ensalada de boj: le 1515, L'Arconsat y Le Camenbert.











Y aún hubo lugar para otra; como se dijo en la entrada anterior los productos centroeuropeos destacaban por su variedad. Se eligió uno de Robert Klaas (kising crane). Es un modelo, y unidad, de los años 60; sus cachas de acero se irisan como pavón real.  De caballero, sí señor.







Dentro de la Coutellerie du roi, en el mostrador-vitrina, hay un apartado para la colección particular del negocio. Navajas del siglo XIX, realmente una panoplia de cortaplumas en materiales exquisitos, si es que tal panoplia pudiera existir.

jueves, 18 de agosto de 2016

LA COUTELLERIE DU ROI-BRUXELLES 1:COUTEAU COUTTIER LE COMPAGNON, COUTEAU COUTTIER LE SAINT GUILHEM, COUTEAU HARTKOPF


 Se sigue con el afán de apuntar, sin la constancia del dietario, las visitas a cuchillerías de esta ciudad. Ya se noveló Au grand rasoir, primera en conocimiento; pase  el turno a la Coutellerie du roi. La primera ocasión estuvo cerrada cuando se adentró en el Passage du Nord. Habíamos seguido por el Boulevard du Midi y se quebró a la derecha,  Place de la Broukere, Palais Royal de la monnaie, y  le Passge por fin. Las fotografías basten para justificar el alboroto incontenible -e incontenido voluntariamente- que se alcanzó en ese momento. 





Entrados que hubimos, un dependiente de pobladísima caballera blanca fue abeiendo la boca a medida que le solicitábamos.  Tenía un hijo en Madrid de estudios. Parece que al chiquillo no se le daba bien el latín, pero sí el griego -C'est bizarre¡-. Nos entrevistó: nombre del hotel, medio de trasporte utilizado, profesión. El caso es que fue competente vendedor; tenía un buen surtido de francesas de Couttier. Conocía yo su modelo primero, le Compagnon, y me fueron mostrados otros más. Del compagnon tenía una xiloteca y vínose conmigo uno en bois de violet que, sino el más bello, sí fue el que mejor anduvo y cantó. No tengo otra que chasquee con más oquedad (como si tejón partiese nuez dentro de una zorrera).

He aquí sus características: 

Comme son nom l’indique, l’indispensable "petit Couttier" au mécanisme très agréable et doux, au design sobre et épuré (une simple boule forgée sur le ressort) ravira femmes et hommes qui souhaitent un couteau performant et peu encombrant.
  • Couteau à cran d’arrêt à platine bloquante
  • Lame acier inox 12C27
  • Ressort forgé guilloché à la main
  • Manche bois de violet
  • Longueur : 10 cm fermé, 18 cm ouvert.
Este modelo fue diseñado y comercializado por Charles Couttier en 1990 con el nombre de Le Triton; en 2001 se le ensancha ligeramente la hoja y se le rebautiza como Le compagnon. 





 Se trata de una navajilla discreta, contenida, moderna pero con apariencia artesana.  El eje superior no es un simple perno sino que se puede atornillar, tiene una mosca oval y el falso muelle tiene limazos: detalles de calidad todos. A mí me parece, cuando la miro arrobado, un caballito de mar.

 Y ahora le St-Guilhem
Le "Saint-Guilhem", couteau néo-régional, revendique fièrement ses origines de terroir méditerranéen (la "grande bleue" n’est qu’à 36 km à vol d’oiseau !), chargé d’histoire et de culture accumulées pendant douze siècles : sa lame généreuse et franche en forme de feuille de sauge, ne cherche pas à évoquer les exploits guerriers des preux chevaliers, comme Guillaume d’Orange, mais plutôt les occupations laborieuses et paisibles des sautarocs – nom des habitants de Saint-Guilhem-le-Désert – cultivant l’olivier sur des terrasses maintenues de pierres sèches, péniblement assemblées, et prenant soin de leurs troupeaux de moutons et de chèvres, nourris des herbes odorantes broutées dans la garrigue.

Son manche de buis, aux lignes courbes, tendues et accueillantes à la main, se termine en forme de boule et nous rappelle qu’à Saint-Guilhem, il fut un temps où les tourneurs sur bois accordaient la musique de leurs tours aux chants des cigales pour fabriquer les boules à jouer recherchées par les amateurs de pétanque et de jeu à la lyonnaise. 

Le Saint-Guilhem a été dessiné par Pierre-Yves Javel , plasticien et collectionneur, passionné des couteaux.

La mise au point du prototype a été réalisé par Robert Beillonnet, deux fois Meilleur Ouvrier de France en coutellerie, et sa fabrication artisanale est assurée par Charles Couttier, Maître Coutelier.



No se dirá que los franceses no saben vender con poesía sus productos; si uno se deja de evocaciones, podrá apreciarse sin esfuerzo que es navaja de líneas esenciales en las que la curva es recursiva en los dos extremos del mango: curva y esfera se potencian, mientras que la anchura de la hoja es contenida con la estrechez progresiva de las cachas hacia  su extremo inferior. Si el señor R. Beillonnet lo puso a punto, ya vale. Ningún alumno más aventajado que este discípulo de Ángel Navarro, el español que enseñó a fabricar navajas  a los franceses.

Se trata de otro de los neorregionales que han salido en torno al camino jacobeo. Este paréceme de los mejores y más acabados por retormar su hoja  la forma lanceolada de todos los cuchillos franceses de pastor que había en el sur de este país. 






Caratéristiques techniques :
  • Couteau pliant une lame, à cran forcé
  • Lame : acier inoxydable 12C27
  • Ressort : acier inoxydable Z20
  • Platines : acier inoxydable Z20
  • Manche : suivant les modèles
  • Longueur fermé : 12,7 cm
  • Longueur totale ouvert : 22,2 cm
  • Longueur de la lame : 9,6 cm.

Se volverá a Couttier; sus navajas tienen el aspecto artesano que les da la falta de brillo (polie miroir), los limazos desiguales, y el tratamiento de la madera (a veces, hay que decir que inadecuado por no aprovechar las posibilidades de pulido, vetas, grano que son potenciados en otros fabricantes como Chambriard o Arto).




Ha podido verse en el escaparateo que junto a francesas (Victorínox por vulgares no se deben contar) destacan las centroeuropeas de Alemania (belgas, salvo artesanos que fabriquen bajo pedido, no hay). Las había viejas (vintage que diría Lucchino) de los años 60 y nuevas. Las más son de la marca Hartkopf; navajuelas de señorito y con aire absolutamente tradicional como lo sean las americanas tipo Case (no en vano estas son hijas de aquellas). Con esta marca hay que andarse con cuidado, por muy alemanas que se digan (recuerdo que en Ganivetería Roca estuve trasteando con una de cierre trasero en amourette, creo, y sus ajustes de platinas eran muy deficientes; de hecho, de eso hace tres años y la navaja aún no se ha vendido pues la he visto en su vitrina). La que se ve arriba, en la parte inferior izquierda, fue la que más me plugo: perfecta. Y aquí está:











AQUÍ SE PODRÁ VER QUE LA BELLEZA O EL ORIGEN NO IMPIDEN LOS DEFECTOS INJUSTIFICABLES EN ESTAS NAVAJAS